Ciertas alteraciones del estado de ánimo forman una clase de patologías denominadas trastornos del estado de ánimo.
Los desórdenes del estado de ánimo se encuentran entre los trastornos más frecuentes.
La presencia de estados de ánimo alterados de manera más o menos persistente generan una alteración significativa en la vida de la persona dificultando su adaptación, alterando aspectos como la autoestima que afectan no solo al propio ámbito afectivo, sino también a la cognición e incluso a la percepción del entorno. Asimismo, generan repercusiones en todos los ámbitos vitales, variando la manera de relacionarse con el entorno y con el resto de personas.
Según algunos psicólogos, el estado de ánimo es una relación entre dos variables: energía y tensión. Según esta teoría, el estado de ánimo fluctuaría entre un estado energético (de más cansado a más activo) y un estado referido al grado de nerviosismo (entre más calmado o más tenso), considerándose el mejor un estado calmado-energético y el peor un estado tenso-cansado.
Estamos ante el grupo de trastornos, junto al de los trastornos de ansiedad, más prevalente a nivel mundial, padeciendo un elevado porcentaje de la población algún tipo de afectación de este tipo
. Asimismo, cabe destacar que el otro grupo de trastornos que acabamos de mencionar, los trastornos de ansiedad, se encuentran profundamente vinculados a estos siendo frecuente que aparezcan conjuntamente o bien que los padecimientos que genera uno terminen por provocar el otro.